martes, 6 de mayo de 2014

Qué fue de ellos

Recuerdo ahora, en el minuto trece de una hora cualquiera,
que ni siquiera importa,
a un chaval que me dio palabras de ánimo
cuando estaba castigada en el pasillo del colegio,
sola y asustada,
es lo que pasa cuando se castiga sin dar razones,
hoy no me acuerdo del motivo, pero sí de aquel chico,
recuerdo a una joven catalana que jugó conmigo un verano
en la piscina del hotel durante horas,
y que me enseñó a que apreciara a mi madre,
ella había perdido a la suya y me miraba a mí
como si poseyera un tesoro,
también a un hombre que me ha sonreído sentado en la puerta de un bar
hace un par de horas
y que me ha hecho sentirme por un momento más guapa,
pero que tengo la certeza de no volver a ver.

Tal vez alguien, en algún lugar,
se pregunte también, qué fue
de nosotros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario